Thursday, May 1, 2014

Un estudio reveló que somos parecidos a los perros más de lo que creemos


Según un estudio publicado en Current Biology esto es posible gracias a la activación de algunas regiones del cerebro. 

Un estudio publicado en la revista Current Biology, revela los alcances obtenidos luego de analizar mediante un escáner cerebral las diferencias y similitudes que comparten los perros con los seres humanos. El estudio revela por qué los perros parecen entender nuestras emociones.

La domesticación del perro se dio entre 19 y 32 mil años atrás, desde entonces estos animalitos han compartido un mismo ambiente social. Todos los que han disfrutado de la compañía de un can han visto que estos atienden a nuestras palabras, algo que otros animales no parecen hacer. 

Las regiones del cerebro encargadas de la función auditiva cumplen un importante rol social. Al fin y al cabo, escuchar y entender a nuestros interlocutores es fundamental, no sólo para comprender el mensaje, sino también para comprender su estado emocional.

La investigación en neurociencia ha estudiado durante los últimos años las regiones del cerebro encargadas de determinar la emoción que transmitimos con nuestras vocalizaciones. Este reconocimiento auditivo resulta fundamental para que podamos procesar una respuesta, adaptando el “tono” a las sensaciones que transmite el interlocutor.

La resonancia magnética es una técnica que permite localizar las áreas del cerebro con mayor actividad al determinar una determinada tarea, por eso los científicos eligieron este método para analizar las diferencias y similitudes entre el cerebro de perros y seres humanos.

Según publicó El Comercio, en el estudio, se fotografió la actividad cerebral al escuchar ciertas grabaciones de audio, la comparación de las imágenes tomadas por resonancia magnética permitió ver que existían similitudes. En ambas especies, las mismas zonas del cerebro variaban al cambiar la emoción transmitida en la pista de audio.

Sin duda, el descubrimiento es extraordinario, pues revela por primera vez por qué los perros parecen entendernos. “Es probable que compartamos esta función con otros mamíferos”, explicó Attila Andics, científico que dirigió la investigación.