Sunday, October 26, 2014

Nutrición para el Alma ¡Las verduras lo tienen!


Las verduras frescas crudas tienen energía vital

Una energía vital que puede fomentar nuestra propia salud y vitalidad. Del Latín vegetabilis (animado) y de vegetare (vivificar), podemos decir que los ‘vegetales’ nos permiten despertar y mover tanto nuestro cuerpo como nuestro cerebro.

La mayoría de las verduras tienen un muy alto contenido de agua y las vitaminas y minerales necesarios. Son un complemento perfecto a las comidas de proteína animal para ayudar a suministrar los nutrientes que colaboran en la digestión y utilización de aquellos alimentos. La mayoría de las verduras son predominantemente carbohidratos, con un importante componente de fibra para ayudar a los intestinos. 

Pero eso no es todo, las verduras están saturadas de vitaminas C y A, junto con algunas vitaminas B, minerales traza, potasio, calcio, magnesio y hierro. Las verduras de hoja oscura y las amarillas o naranja tales como zapallos, zanahorias y pimientos, son todos ricos en beta-caroteno, el cual produce vitamina A en nuestro cuerpo. La vitamina A ayuda a proteger los tejidos durante los procesos infecciosos, repara los tejidos consecuencia de heridas o cirugía y propicia una rápida recuperación.

La formación y mantenimiento del colágeno, la base del tejido conectivo, el cual se encuentra en la piel, ligamentos, cartílagos, discos vertebrales, recubrimiento de las articulaciones, paredes capilares y los huesos y dientes, es una función importante de la vitamina C. Esta vitamina también se utiliza para ayudar a las personas que están absteniéndose de adicciones a drogas o sustancias como el azúcar, la nicotina, el alcohol y la cafeína. Hay tanto que compartir; sin embargo por ahora simplemente podemos decir…. 

¡LAS VERDURAS LO TIENEN TODO!

La clorofila, la cual es parte de la mayoría de las plantas y es especialmente elevada en las verduras verde oscuro, tiene propiedades sanadoras especiales. Al igual que la sangre es el componente más básico del cuerpo humano, las plantas tienen su base en la clorofila. Muchos estudios han demostrado que los extractos de clorofila proporcionan nutrición intestinal, y tienen un efecto de alivio o sanador sobre las mucosas. La clorofila es beneficiosa para la desintoxicación o purificación de nuestro sistema, el hepático en particular, así como para la sanación de úlceras de la piel. Se han atribuido efectos anticancerígenos a las verduras de la familia crucífera tales como el brócoli, coles de Bruselas y la coliflor.

La forma más nutritiva de consumir verduras es en forma fresca y cruda. Sin embargo, las verduras crudas, cuando se consumen en grandes cantidades, son más difíciles de masticar y digerir para algunas personas y pueden producir gases intestinales. El brócoli es un ejemplo de una planta cruda con esta cualidad. Un ligero hervor del brócoli (verduras) lo ablandará sin reducir mucho sus nutrientes. Las verduras cocidas al horno también mantendrán sus nutrientes. Si hervimos las verduras, muchos de sus nutrientes se perderán en el agua, así que a menos que quiera tomarse el agua o hacer una sopa con ella, hervir no es lo ideal.

Al mantenerlas con una sensación de frescor, crudas o ligeramente cocidas al vapor, las verduras de hojas son probablemente las más ricas en nutrientes de todos los alimentos del reino animal o vegetal. Mientras más verdes, más nutritivas (verde = clorofila).

Las hojas verdes del diente de león son una de las fuentes más ricas de vitamina A y se conoce que neutralizan el exceso de ácido en el estómago e intestinos. Las propiedades sanadoras de las hojas y raíces abarcan desde el tratamiento de una diversidad de trastornos del hígado y vesícula biliar, enfermedades de las mamas y retención de líquido, hasta el alivio del dolor de las coyunturas, fiebre y enfermedades de la piel. En 1984 el Departamento de Agricultura de los EEUU clasificó al diente de león entre las cuatro verduras de hoja más importantes debido a su valor nutritivo total. Esta verdura altamente energética constituye una maravillosa adición sanadora a una deliciosa ensalada de verano.

La col rizada es una verdura bastante sabrosa con una rica gama de nutrientes. Adicionalmente a la col rizada común en muchos mercados, también puede encontrarse como col rizada lacinato y col rizada morada, que tienen un sabor más dulce. Antes de darle la espalda a esta delicia, verifique los nutrientes contenidos en una sola taza de col rizada cocida al vapor. Note que una taza de col rizada al vapor requiere de dos a tres tazas de col fresca, así que las siguientes cantidades son aproximadas:
1. Poco más de 50 calorías
2. 10g de carbohidratos
3. 3-4g de proteínas
4. 2-3g de fibra
5. Menos de 1g de grasas
6. Alrededor de 8 000 unidades de vitamina A
7. Entre 150 y 200mg de calcio
8. 30mg de magnesio
9. 2mg de hierro
10. 300mg de potasio
11. La vitamina C está presente entre 100-150mg
12. Trazas de manganeso, cobre y zinc
13. Menos de 50mg de sodio
  1. Con 40mcg de ácido fólico
¿Podemos decir caramba, o caray? ¡Las verduras lo tienen todo!

Aquí otras delicadezas más:

El repollo es una planta crucífera anticancerígena de bajo contenido graso y que puede incluso ayudar a reducir los niveles de grasa corporal.
El repollo de col roja es más abundante en vitaminas A y C, pero escaso en ácido fólico y clorofila.
El repollo fermentado, denominado sauerkraut, es abundante en enzimas digestivas y es un protagonista clave en la eliminación de cándida del cuerpo.
La acelga es una fuente rica en vitamina A y tiene cantidades razonables de vitamina C, ácido fólico, calcio, magnesio, sodio y potasio. La acelga común o la arco iris es buena servida caliente con un toque de mantequilla derretida o aceite de linaza. Uno de mis desayunos favoritos incluye dos tazas de acelga cocida al vapor con seis claras de huevo y una cucharadita de aceite de linaza. Me siento muy satisfecha después de este desayuno.
Las verduras tipo repollo cocidas al vapor son maravillosas con cebolla salteada. Los repollos son fuertes en ácido fólico y vitamina C y son otra fuente rica en vitamina A. Los repollos constituyen una excelente fuente de fibra y contienen calcio, potasio, hierro y zinc en abundancia. Otra receta maravillosa es la cebolla salteada + repollos al vapor + pavo molido + aceite de linaza por encima. ¡Sabroso!
La lechuga de hoja verde, de hoja roja y del tipo romana es maravillosa en ensaladas. Recuerden, las que son de color verde oscuro son ricas en clorofila, vitamina A y ácido fólico. Las lechugas también contienen algo de calcio, potasio y hierro y son buenos alimentos de fibra.

Podemos adicionar la espinaca a esta familia de verduras de hoja verde también. Los animados de Popeye dieron popularidad a la espinaca con el dicho de que “la espinaca te hace fuerte”. Una taza de espinaca cruda tiene alrededor de 2mg de hierro; 4 500 IU de vitamina A y una dosis saludable de vitamina C. Las vitaminas B son escasas excepto por el ácido fólico. El potasio, magnesio y calcio son elevados con el cobre, manganeso y zinc saludando sanamente. 

La espinaca cruda contiene ácido oxálico, el cual puede enlazar algo del calcio y otros minerales. La espinaca es una buena adición a una ensalada o puede utilizarse como sustituto de la lechuga. Nota: una vez que se ha cocido la espinaca fresca o se ha abierto una lata, debe consumirse ese mismo día y no guardarse, debido a la potencial oxidación del hierro.

El berro es una planta picante de la familia de la mostaza y se la utiliza en herbología para purificar la sangre. Conocido como un superalimento anticancerígeno, el berro puede reducir significativamente el daño al ADN de las células sanguíneas cuando se come cotidianamente. Esta hierba picante es una hermosa adición a ensaladas y contiene cantidades elevadas de vitamina A y calcio. Están presentes trazas de casi todas las vitaminas B conjuntamente con vitamina C, potasio, hierro y magnesio.

En este punto es mi intención añadir unas cuantas ideas para recetas. Google abrió un enorme portal de posibilidades. Encontré sopa de berro; salmón tailandés a la parrilla con berro; acelga arco iris con nueces de pino, queso parmesano y albahaca; cacerola de frijoles blancos con hongos y col rizada….y la lista sigue creciendo. Así que en lugar de ir con lo que a MÍ me está haciendo dar hambre, vayan a su ordenador y busquen lo que USTEDES quieren.
Sean creativos al explorar estas plantas maravillosas, sanadoras y saludables, que le aportan vitalidad a su plato.


Por Nadine, N.D., C.N.S
Traducción: Fara González
Fuente:Edición: El Manantial del Caduceo
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm